Estos días el lince es noticia por dos sucesos esperanzadores:
Según un equipo de investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos hay lince en la Comunidad de Madrid. Entre julio y octubre del pasado año recogieron unas heces sospechosas de ser de lince, lo que ha sido confirmado por los análisis del Museo Nacional de Ciencias Naturales-CSIC. El hallazgo tuvo lugar en la ZEPA y LIC de los ríos Cofio y Alberche, en el suroeste de la Comunidad de Madrid. Que haya un lince en esta zona es una gran noticia, por las posibles utilidades desde el punto de vista genético para el plan de cría en cautividad y porque supondría la existencia de esta especie fuera de los núcleos de Andujar y Doñana, los dos únicos considerados como viables por los expertos. Además, con mucha suerte, no se trataría de un ejemplar aislado y podría haber más linces en la zona o en los alrededores. El año pasado por estas fechas también se confirmó la presencia de al menos dos ejemplares de lince en los Montes de Toledo, mediante el análisis de heces con el mismo sistema empleado ahora. En Extremadura también hay esperanzas de que quede algún lince.
La Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid se ha apresurado a desmentir la existencia del lince en la zona, porque tienen dudas de que los excrementos hayan sido recogidos donde los investigadores dicen que lo hicieron. Al parecer los investigadores no les notificaron el hallazgo y esto no se adecua al procedimiento correcto, por lo que dudan de la sinceridad y honestidad de los mismos. Además los informes técnicos elaborados por su personal y el personal del Ministerio de Medio Ambiente certifican que no hay lince en Madrid ni en los territorios limítrofes de otras comunidades
(Infoecología). En el
diario ADN, Emilio Virgós que es del equipo que encontró los excrementos, dice que lo comunicó de inmediato al coordinador general sobre el lince del Ministerio de Medio Ambiente. Bueno, como no podía ser de otra de forma cuando de excrementos se trata, la cosa comienza a oler mal, a apestar,… Tal vez Nicolás Guzmán, que es el coordinador de la estrategia estatal para el lince, podría aclarar si es verdad que el sabía de la posible aparición de excrementos de lince en Madrid desde las fechas que citan los descubridores de los mismos. Hasta ahora desde el Ministerio no se ha dicho nada de nada.
La segunda noticia esperanzadora para el lince es que Saliega, la hembra de lince cautiva en el Centro de cría en cautividad del lince “El Acebuche” de Doñana, ha alumbrado a dos cachorros. El año pasado esta hembra ya parió tres cachorros; Brezo, Brisa y Brecina; aunque esta última murió al mes y medio de nacer en una pelea con su hermano Brezo, y que justamente
hoy cumplen un año de vida. De momento no se sabe el sexo de los cachorros y por lo tanto aún no se les ha puesto nombre, que será el de una planta que empiece por la letra C. No se sabe aún quién es el padre, ya que Saliega se cruzó con dos machos diferentes; Garfio y Cromo; con la intención de lograr un mayor éxito reproductivo. Garfio es el padre de los cachorros del año pasado. Hay otras cuatro hembras que podrían estar preñadas y parir en los próximos días, esperemos que sea así y que el “stock” de linces del programa de cría en cautividad siga aumentando. Parece que se va a conseguir un aumento del presupuesto de este programa, hasta los 29 millones de euros, cantidad que resulta bastante triste, si se valora lo que hay en juego, frente a lo que se invierte en otras cosas (29 millones de € = 10 Km de autovía normalita, por terreno llano; o 2-3 Km en terreno quebrado).
Y ya parece que los políticos están echando las campanas al vuelo y
buscándoles casa a estos pobres cachorrejos, porque claro, el programa de cría en cautividad es un éxito, que se debe a ellos, y cómo mucho en el 2009 tienen que empezar a soltar linces en diferentes zonas de Andalucía, Extremadura y Castilla- La Mancha. ¡¡Qué bonita foto la del Consejero o Presidente autonómico de turno liberando con sus propias manos al cachorro en su nuevo territorio!! Mientras tanto, no lejos de allí, una nueva valla cinegética se levanta cuarteando la sierra, una pista es asfaltada, una carretera desdoblada y unos cuantos cebos envenenados colocados por algún alma negra….
De esto, hablaremos otro día…
